Sí, amigas y amigos. Lo habéis leído bien: la pareja es un trío. Uno en el que el tercer sujeto se llama nosotros.
Tú, yo y nosotros. Yo, con mis años, mis experiencias, aprendizajes, alegrías y penas, virtudes y defectos; tú, con tu mochila llena de vida y recuerdos, carencias, deseos y excesos, proyectos cumplidos e ideas locas… Nosotros ¿Qué es eso? ¿Quién es?
Nosotros es un ente energético con vida propia y, como toda vida, tiene unas necesidades que han de ser cubiertas por las personas que lo han concebido o engendrado. Nosotros no se alimenta del aire, ni de palabras, ni de películas románticas ni de noches de sexo desenfrenado. Nosotros ha de ser atendido con cariño y entrega consciente. Aunque tampoco debemos permitir que ese ser se apodere de nuestra existencia. No podemos rendirle pleitesía cual autoridad acaparadora.
Nosotros necesita tiempo, espacio, dedicación, concesiones, amor, ternura, comunicación, risas, miradas, complicidades, pasión, juegos, proyectos, consensos, ilusión, ajustes, tolerancia, límites, aprendizajes, lecciones, intimidad, compromiso, honestidad, madurez, servicio, gratitud, empatía, responsabilidad, voluntad…
Las personas que quieren pronunciar “nosotros” han de estar dispuestas y en predisposición para dar una parte de sí mismas, para construir y nutrir un proyecto de tal envergadura que con el tiempo, irá adquiriendo diferentes expresiones, significados, importancia y magnitud.
Las personas que forman un nosotros han de consensuar cuánto de cada uno se está dispuesto a dar o invertir. Unas veces, nosotros es demasiado ambicioso y trata de anular a los individuos que lo quieren. Otras, nosotros consume a las personas no dejándoles espacio ni aire para respirar solos. Incluso puede que se convierta en un monstruo irrespetuoso del que mejor huir. Las personas que crearon a ese ser han sido engullidas por él.
Decir nosotros es asumir que vamos juntos. Puede que a veces más alejados e independientes, o puede que tan cerca que los alientos y el Ser se confundan. Puede que uno necesite volar los vientos mientras que el otro bucea en las profundidades. O puede que su oscuridad te ciegue. Pero nosotros sabe y siente que vamos juntos y que, en parte, estamos siendo juntos.
Nosotros es arriesgarse a compartir la vida… a compartirse sin perderse a uno mismo.